Con tan solo 18 años, el cantante y productor MC Staff transformó el sonido de las calles de la costa de São Paulo en una tendencia global. Originario de Guarujá, se ha convertido en uno de los máximos exponentes del phonk brasileño, un género que fusiona ritmos contundentes, estética urbana y una energía casi hipnótica. Sus temas independientes han trascendido fronteras y conquistado a millones de oyentes en todo el mundo, consolidándolo como una de las voces más prometedoras de la nueva generación.
En una entrevista, MC Staff habla sobre su meteórico ascenso, el poder de la autenticidad en el funk contemporáneo y el equilibrio entre el éxito digital y la conexión con el público en vivo. “Lo más increíble es ver cómo mi estilo viaja por el mundo. La música que nació en mi habitación ahora suena en lugares que jamás imaginé”, resume el artista, quien se prepara para lanzar nuevos videoclips y colaboraciones con grandes figuras del phonk, como Bibi Babydoll y MC Ster.
Dejaste la costa de São Paulo y, en pocos años, te convertiste en un referente mundial en un género que hasta hace poco era underground. ¿Qué te ha marcado más en este rápido viaje?
¡Madre mía, qué fuerte! Dejé Guarujá y, en tan solo unos años, me convertí en un referente de un género que hasta hace poco era muy underground. Lo curioso es que mi madre sigue triunfando allí en Guarujá, y yo ya vivo en São Paulo, dedicándome a la música. Llevaba años en la música, cantando una versión diferente del funk, pero cuando descubrí el phonk, fue como encontrar la pista de baile perfecta en una fiesta: me lo pasé muchísimo mejor. ¿Qué fue lo que más me impresionó? Ver cómo mi estilo se extendía por todo el mundo, cómo gente de todas partes disfrutaba de lo que hago… eso no tiene precio.
PHONK tiene una estética potente, casi hipnótica, que fusiona ritmos contundentes con energía urbana. ¿Cómo describirías tu estilo y qué lo distingue dentro de este universo?
Mi estilo es una mezcla de energía callejera y libertad absoluta. Juego con ritmos potentes, pero también dejo espacio para melodías más sutiles, que cautivan sin agobiar. Lo que me distingue es que no intento imitar a nadie: cada canción lleva un pedacito de mi historia, desde la costa hasta la ciudad, y esto le da su propia identidad dentro de este universo hipnótico. Es una delicia escucharla, sentirla y dejarse llevar por el sonido al mismo tiempo.

El género se originó en el extranjero, pero usted contribuyó a transformarlo en un fenómeno brasileño. ¿Qué se siente al ver al público internacional consumiendo y bailando algo producido aquí?
¡Es surrealista, tío! Phonk nació en el extranjero, pero ver cómo adquiere un aire brasileño y cómo el público internacional disfruta de nuestra música es una locura. Estás en el estudio o en tu habitación y, de repente, gente al otro lado del mundo está bailando una canción que yo he compuesto. Es esa mezcla de orgullo con un «¡guau, estamos haciendo historia!», y aún se siente que nuestra forma de contar historias conecta con todo el mundo.
Muchos de tus éxitos nacieron de forma independiente. ¿Qué piensas cuando ves que una de tus canciones triunfa en redes sociales y es usada por millones de personas en todo el mundo?
¡Es increíble! Cuando una canción independiente se vuelve viral y la escuchan millones de personas, sientes una mezcla de orgullo y gratitud. Se me pone la piel de gallina al pensar que algo mío suena en los auriculares de gente que ni siquiera conozco, en lugares que jamás imaginé. Es ver cómo años de esfuerzo y pasión se transforman en una conexión real con el público.

Tienes solo 18 años y ya eres una de las voces más importantes de la nueva generación. ¿Qué aporta la juventud de diferente a la música urbana actual y qué quieres representar con tu arte?
¡Tener 18 años y estar ya aquí es surrealista! Creo que la juventud aporta valentía y libertad a la música urbana: no tenemos miedo de experimentar, mezclar estilos y decir lo que realmente sentimos. Con mi arte, quiero representar la verdad y la autenticidad, demostrar que se puede disfrutar, expresarse y, a la vez, inspirar a quienes escuchan. Se trata de vivir intensamente, pero con la mente clara de lo que queremos construir.
¿Cómo se te ocurren las ideas para tus canciones? ¿Eres de los que pasa el tiempo en el estudio experimentando con sonidos o prefieres dejar que la inspiración te llegue de forma natural?
Mis ideas suelen surgir del Mandela Funk Original de Brasil, mi primer contacto con la música, que me enseñó mucho sobre ritmos y fluidez. Más tarde, me adentré en el phonk, que es mi estilo actual. Mi inspiración surge de forma natural, a menudo de situaciones vividas o sentimientos que quiero transmitir. No fuerzo nada en el estudio; dejo que el sonido fluya y transformo esas experiencias en música que todos pueden sentir.

Eres un fenómeno tanto en internet como en las calles. ¿Cómo logras equilibrar estos dos mundos: el digital, de números y reproducciones, y el real, de conectar con el público en vivo?
Es un equilibrio complicado, pero lo disfruto muchísimo. En el mundo digital, ves las cifras, las reproducciones, el alcance, lo que te da una idea del impacto. Pero nada se compara con la calidez de un público en vivo, ver a todos cantando, saltando y sintiendo la misma energía que le pones a la canción. Intento vivir en ambos mundos, sin dejar que lo digital me domine, recordando siempre que la conexión real con el público es lo que le da sentido a todo.
Phonk ya es tendencia global, y tú eres el centro de atención. ¿Qué podemos esperar de tu próximo paso? ¿Nuevos estilos, colaboraciones internacionales, quizás incluso un álbum?
El phonk está conquistando el mundo y yo estoy en el centro, así que el siguiente paso es llevarlo aún más lejos. Prepárense para nuevos ritmos, colaboraciones internacionales y muchas sorpresas. Habrá colaboraciones con Bibi Babydoll, MC Ster y otros grandes nombres del phonk. Además, los videos musicales de «Dia Delícia» y «Mente Má» ya están disponibles en mi canal oficial y capturan a la perfección la esencia que me trajo hasta aquí.
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